
En un movimiento que ha reavivado el debate sobre la política ambiental, el expresidente Donald Trump anunció el viernes que firmaría un decreto ejecutivo la próxima semana para deshacer un plan de la era Biden para eliminar gradualmente las pajitas de plástico para 2027.
El anuncio, hecho en la plataforma de redes sociales de Trump, Truth Social, criticó las pajitas de papel como ineficaces y señaló una posible reversión de las restricciones más amplias al plástico de un solo uso.
“¡VOLVAMOS AL PLÁSTICO!”, escribió Trump. “Las pajitas de papel no funcionan”.
El plan de la administración Biden, anunciado el verano pasado, tenía como objetivo eliminar gradualmente los plásticos de un solo uso en todos los edificios del gobierno federal, incluidas las pajitas.
El gobierno federal, como el mayor comprador de bienes de consumo del mundo, había tratado de dar ejemplo en la reducción de residuos plásticos.
Sin embargo, la última medida de Trump pone de manifiesto la profunda división partidista sobre las regulaciones ambientales y su papel en abordar el cambio climático.
El plan de eliminación gradual del plástico de Biden se centró en los artículos de un solo uso
El informe de 83 páginas de la administración Biden, publicado en 2023, pidió al gobierno federal que eliminara gradualmente los plásticos de un solo uso, incluidas las pajitas, los cubiertos y los envases, para 2027.
El plan también abogó por regulaciones más estrictas sobre la fabricación de plásticos, citando los riesgos ambientales y para la salud asociados con la producción y eliminación de plásticos.
Más del 90% del plástico se deriva de combustibles fósiles y su producción e incineración liberan cantidades significativas de dióxido de carbono, un importante contribuyente al cambio climático.
The report emphasized the need for “unprecedented action at every stage of the plastic lifecycle,” from reducing pollution in petrochemical production to increasing recycling and investing in alternative materials.
Brenda Mallory, entonces presidenta del Consejo de Calidad Ambiental de la Casa Blanca, y Ali Zaidi, entonces asesor climático nacional de la Casa Blanca, escribieron en el informe:
Hacer frente a la contaminación plástica y sus impactos asociados requerirá aumentos drásticos en el reciclaje y la reutilización, e invertir en materiales innovadores para reemplazar el uso generalizado de plásticos en nuestra sociedad.
El cambio cultural hacia la sostenibilidad enfrenta resistencia
El anuncio de la administración Biden se produjo en medio de un cambio cultural más amplio hacia la sostenibilidad.
Muchas empresas del sector de la hostelería ya habían comenzado a cambiar de pajitas de plástico a de papel, respondiendo a la demanda de los consumidores de alternativas ecológicas. Varios estados azules y jurisdicciones locales también implementaron leyes que prohíben o desincentivan el uso de plásticos de un solo uso.
Sin embargo, la medida enfrentó críticas de algunos sectores, particularmente de los republicanos, quienes argumentaron que tales regulaciones eran demasiado onerosas e ineficaces.
El último anuncio de Trump refleja esta oposición, y su enfoque en las pajitas de plástico simboliza una resistencia más amplia a las regulaciones ambientales.
Si bien la publicación de Trump no mencionó explícitamente otros artículos de plástico de un solo uso, la orden ejecutiva podría extenderse potencialmente a revertir las restricciones sobre una gama más amplia de productos.
Esto ha generado preocupación entre los defensores del medio ambiente, quienes advierten que tal medida socavaría los esfuerzos para reducir los residuos plásticos y combatir el cambio climático.
Producción de plástico y cambio climático: una preocupación creciente
La producción mundial de plástico se ha disparado en las últimas décadas, con más de 400 millones de toneladas métricas producidas anualmente.
This explosion in production has heightened concerns about its environmental impact, particularly its contribution to climate change.
El plástico no solo se deriva de combustibles fósiles, sino que también libera gases de efecto invernadero cuando se incinera o se deja degradar en el medio ambiente.
Los microplásticos, pequeñas partículas que resultan de la descomposición de artículos plásticos más grandes, se han encontrado en océanos, ríos e incluso en cuerpos humanos, lo que representa posibles riesgos para la salud.
Los demócratas y los grupos ambientalistas han argumentado que reducir la producción y el desperdicio de plástico es esencial para mitigar el cambio climático.
Señalan el plan de la administración Biden como un paso necesario para lograr este objetivo.
Sin embargo, los republicanos y los grupos industriales han contraargumentado que tales regulaciones podrían dañar a las empresas y limitar la elección del consumidor.
El debate más amplio sobre la política climática
El debate sobre las pajitas de plástico es emblemático de una división ideológica más amplia sobre el papel del gobierno en abordar el cambio climático.
Los demócratas han presionado por una acción agresiva para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incluida la transición a energías renovables y la implementación de regulaciones ambientales más estrictas.
Los republicanos, por otro lado, a menudo han enfatizado el crecimiento económico y la independencia energética, a veces a expensas de las preocupaciones ambientales.
Es probable que la orden ejecutiva prevista por Trump polarice aún más este debate.
Si bien sus partidarios pueden verlo como una victoria para la elección del consumidor y la libertad económica, los críticos argumentan que representa un paso atrás en la lucha contra el cambio climático.
Los defensores del medio ambiente han advertido que revertir la prohibición de las pajitas de plástico podría sentar un precedente peligroso y dificultar la implementación de futuras regulaciones destinadas a reducir los residuos plásticos.
También destacan la importancia de abordar las causas fundamentales de la contaminación plástica, incluida la dependencia de los combustibles fósiles para la producción de plástico.
¿Qué sigue para las regulaciones de plásticos?
Mientras Trump se prepara para firmar la orden ejecutiva, el futuro de las regulaciones sobre plásticos sigue siendo incierto.
La medida podría desencadenar desafíos legales por parte de grupos ambientalistas, al tiempo que reavivaría los debates en el Congreso sobre el papel del gobierno federal en la regulación de los plásticos de un solo uso.
Mientras tanto, las empresas y los consumidores deben lidiar con un panorama regulatorio cambiante.
Si bien algunas empresas pueden seguir ofreciendo pajitas de papel y otras alternativas ecológicas, otras podrían volver al plástico si el gobierno federal da señales de relajación de las restricciones.
El debate sobre las pajitas de plástico puede parecer trivial para algunos, pero subraya un problema mucho más grande: la urgente necesidad de abordar la contaminación plástica y su impacto en el medio ambiente.
Mientras el mundo lucha contra la creciente amenaza del cambio climático, las decisiones que se tomen hoy tendrán consecuencias de largo alcance para las generaciones futuras.
The post Trump revierte la prohibición de pajitas de plástico de Biden, reavivando el debate ambiental appeared first on Invezz